jueves, 30 de mayo de 2013

Un sueño...



En el sueño el padre abraza a la madre en la cama y la madre le dice al padre que ha soñado con el hijo. El padre llama al hijo y el hijo le responde. Estoy aquí, papa ¿quieres que vaya?. Ven, hijo, ven. Su dulce vocecita se escucha lejana desde la otra habitación. Luego se oye más cercana. Y luego un poco más. Estoy llegando, papá. Te quiero.

En la penumbra del cuarto, el hijo es una voluta de humo. Apenas perceptible. El padre y la madre empiezan a comprender. La forma se aproxima. Habla. Su voz les rompe los corazones. El humo, la emanación, va tomando el rostro y la figura del hijo. Papá y mamá terminan por comprender. El hijo se sitúa a la altura de sus cabezas. Sonríe. El osito entre sus brazos. Les habla. Les acaricia. Aquí estoy. Os quiero. El padre y la madre le tocan. No pueden sonreír. Lloran.

Después, el padre despierta del sueño. Acongojado. Las lágrimas no cesan. Se levanta. Va.

El hijo duerme tranquilo en la habitación de al lado.

Se niega a pensar. Se niega a comprender.